Mis Primos Cachondos

Mis Primos Cachondos
Esta anecdota es de hace varios años ya muchos años jaja y como viene abril el mes del niño les dejo esta historia que tuve con mis primitos vivimos en México D.F. que en ese entonces era una quinceañera y mi hermano dos menos. El edificio dónde vivíamos, está dividido en dos, con cuatro departamentos cada uno, estos departamentos los rentan, uno lo ocupan unos estudiantes, otro una familia, el nuestro, y otro que esta en renta. La situación era dura para mis tios en el estado de Puebla, asi que tuvieron que venirse al D.F. y rentaron el departamento desocupado, mi tio se fue al otro lado con mi papa; mi tía y mi madre, tuvieron que trabajar. En la familia de mi tio eran él, mi tía y cuatro hijos, mis primos Jano de 20, Rulo de 18, Chuy y Pepe mas chicos.

Un día fuimos a nadar, y escuchaba lo que decían los chicos en mi vestidor, me pidieron una toalla a mi hermano: -Préstame tu toalla que yo no traje la mía - Me dijo Jano y se la presto. -y esa toalla, no es la tuya, ¿De quién es? me dijo pepe -Es la de mi hermana. Escucho como me dicen a mi hermano: -Mira Luís, me dijo Chuy, sonriendo -Reyna se seca con esa toalla, las nalgitas y este guey se esta secando la verga, jaja. -Si guey, es como si se estuviera cogiendo a tu hermana.

Un día mi primo Jano, me estaba enseñando a manejar la bicicleta y estaban bromeando a mis espaldas pero alcance a escuchar:
-Ya vieron las nalgotas que se me ven a la prima Reyna Dijo Pepe
-Lo que me calienta más es como se me mete el asiento entre las nalgas Dijo mi primo Chuy
- Mira como se come el asiento el culo de Reyna, jaja.
-Me gusta como se me mueven las nalgas. Dijo mi primo Rulo
-Se me ven bien ricas. O ¿no?
Luego, dirigiéndose a mí hermano, me dijeron:
-Luís, tú ¿la has visto encuerada? -Si. Casi todos los días dijo, inocentemente
-¿Y qué tan grande tiene las chichis?
-Pues son chiquitas como mi mano pero no me gusta hablar de eso.
-Yo si tuviera una hermana así, me la cogía
Dijo Pepe, ya caliente
- Me valdría madre que fuera mi hermana. ¿A poco no se te para la verga, cuando la ves en pelotas?
-Están locos, es mi hermana, la quiero mucho, ¿cómo se me va a parar la verga con ella? También es mi prima, no deberían expresarse así.
-A la prima, se me arrima
Dijo Rulo
-Eso dice el dicho, jaja. Si se dejara, yo si me cogía a Reyna. ¿Y ya tiene pelos? ¿Se rasura?
-Ya no quiero hablar sobre mi hermana.

El otro dia se acercó mi hermano y me conto que mis primos me espiaban cuando me bañaba
-Tú lo has visto, quién y quién son los que me veían -Si, pues todos mis primos Pepe, Chuy, Rulo y Jano. -Jano ¿También? -Si? ¿No te enojas? -Son unos tontos, Porqué habría de enojarme, ¿te han dicho acaso que estoy fea? -No. Al contrario, dicen que estás muy bonita y? -y ¿Qué?
-Y que estás muy buena, y todos quieren cogerte. -Jaja, pero si son unos tontos

Me conto todo lo que decían sobre mi cuerpo y en vez de enojarme, me daba gracia
-A poco te gusta que te vean encuerada ?me dijo -Que tiene de malo, tú me ves y no pasa nada. - Pero yo soy de la familia - -Ellos también. Son nuestros primos, no tiene nada de malo, jaja, que tontos?
Despues se organizo la fiesta de fin de año en la cual bebi unas cervezas y empeze a bailar y a marearme asi que fui y me abraze de mis primos y ellos se ofrecieron a darme un masaje para que sintiera mejo,r me acostó boca abajo, separando levemente mis piernas. Jano, tomó mis tobillos y los empezó a masajear.

-¡Que rico primo! -¿Te puedo dar masaje en la espalda? ?Me dijo Rulo-Si.

Rulo se colocó a un lado y me subió hasta el cuello la blusa quedando mi espalda descubierta. Y empezó a dar suaves apretones. Mientras Jano, iba subiendo en mis masajes, ahora me acariciaba mis torneadas piernas hasta casi verme el calzón blanco metido entre mis nalgas. Pepe y Chuy estaban sonriendo, mirando entre las piernas y sobándose el paquete que se les formó en mis pantalones.

Chuy sin miramientos me subió la falda hasta la cintura, apareciendo mi calzoncito blanco. . Mientras Rulo me pasaba las manos por los laterales de mi espalda hasta alcanzar mis enormes globos de carne por los costados. Pepe y mi Hermano veian en silencio. Varias veces paraban mi masaje para acomodarse el bulto.

-Reyna, es mejor si te quitas toda la ropa, así podemos darte masaje en todo el cuerpo. ?Me dijo Jano - ¿Ustedes creen que sea mejor? Sin contestar, Rulo me sacó la blusa y Jano me quitó la falda y me bajó poco a poco el calzón blanco. Chuy me tomo de las nalgas y abriéndomelas introdujo su rostro entre ellas y empezó a chuparle el culo. -¡Ay! ¡Que me hacen!

-Ya te dije, eres muy hermosa y estas muy buena, me gustas como prima y como mujer, si tú quisieras te cogía toda la noche. Mira como me tienes ?Me dijo Refa bajándose los pantalones y saltando una enorme y gruesa verga que se mecía grotescamente de abajo hacia arriba hasta casi llegarle al ombligo. -Y a mis hermanos los tienes igual ¿Verdad? Enséñenle como la tienen.

Todos se desnudaron Rulo tenía la verga más grande que todos, era gorda y morena, Pepe tenía el pene más pequeño y delgado, Chuy tenía la verga igual de grande que la de Rulo, pero esta estaba muy delgada.

Jano-Reyna andale, déjate coger ¿si? Tú no puedes coger con extraños, porque esta mal visto, si se dan cuenta la puedes pasar muy mal y te vas a desprestigiar, a lo mejor nunca te casas, porque van a pensar que eres una puta. En cambio si lo haces con nosotros, tus primos, que somos familia, nadie dice nada, nadie se entera, tú sigues siendo una mujer casta y virgen hacia los extraños. Además vas a tener experiencia cuando te cases y tengas relaciones con tu futuro esposo, ya vas a saber todo lo relacionado con el sexo.

-¡Ah! No lo había pensado así, tal vez tengas razón? -Entonces ¿te dejas? ?Me dijo suplicante Chuy-. Ya no me dejaron terminar, se abalanzaron como buitres

Duraron como diez minutos, todos, chupando, mordiendo suavemente alguna parte de mis carnes, hasta que empezaron a desesperarse y a querer abarcar los lugares de otros, se empezaron a aventar hasta casi tumbarme Jano fue el que puso orden.

-¡Ya déjenla! Me la voy a coger yo primero y después va por edad. -Házmelo despacio primito, soy virgen.

Jano se acomodo, entre mis piernas empezó a pasar su pene, empujó, sacandome un leve quejido. Paró las nalgas, agarrando vuelo, y me la volvió a meter con fuerza, esta vez , hasta el fondo de mi. Empezó un movimiento cadencioso, mientras me besaba cada vez entraba y salía más rápidamente agitando todo el cuerpo y sacando su babeante verga escupió varios chorros de semen que me llegaron hasta mi cara y formándose un charco de semen en mi ombliguito.

-Ponte de rodillas. ?Me dijo Rulo-. Se puso de rodillas. Y me la metió de una embestida en 4 y empezó a bombear fuertemente. -¡Ahhh!, Si, si, ¡mmmm!, ah, ah, ah, ah, me estoy viniendo primito, aoouuuuch, que rico.

Pepe ya no se aguantaba y arrodillándose frente a mi me dijo -Por favor prima bonita, mámame la verga, que ya no me aguanto, abri m iboca y trague un buen trozo de verga, Rulo se empezó a contorsionar y asiéndose de mis poderosas caderas me clavó la verga hasta el fondo. Después extrajo rápidamente la verga y empezó a escupir chisguetes de leche, que me bañaron la espalda, Pepe apretó mi nuca he hizo que tragase toda su delgada verga hasta el fondo y se vino en mi boca, provocándome varias arcadas, toser y escupir el semen.

-Comételos -Me dijo Chuy-. -Ay no, me dio asco, están muy calientes y pegajosos.
-Pues debes aprender a comértelos ?Me dijo Chuy-. A los maridos les gusta que mis esposas se traguen los mecos. Chuy se acostó en la cama e hizo que lo montara y que me enterrara la verga -¡Que rico me aprietas la verga! ?Me gritaba Chuy, convulsionando-.Ten prima, mi leche, tómala toda, es tuya primita, te la dejo en el fondo de ti, que buen palo, oh, divino, como me exprimes la verga. -Para esto mi hermanito se la jalo viendo el espectáculo nada mas es muy miron.

Todos los días sin falta, mis primos tuvieron sexo onmigo, me enseñaron a comerme los mecos sin asco, me la metieron por el culo, al principio batallaron mucho, porque me dolía cuando trataban de introducirla por ese agujero, pero con paciencia poco a poco fueron dilatándomelo hasta que me la metió Pepe primero, Luego Chuy, luego Rulo y Jano solo podían meterme la cabeza, hasta que un día se les ocurrió ponerle aceite de bebe enmi cola y Jano se la dejo ir hasta que chocaron sus peludos guevos.

Asi fue la historia hasta que mi tio consiguió dinero y se llevo a su familia, dejaron de cojerme y deje de saber de ellos.